La muerte de la guatemalteca María Florinda Ríos Pérez, de 32 años, ha generado conmoción entre la comunidad migrante. La mujer, originaria de Quetzaltenango, falleció en el estado de Indiana, Estados Unidos, después de recibir un disparo en la cabeza al llegar, por error, a una vivienda donde debía realizar labores de limpieza.
De acuerdo con las autoridades locales, el incidente ocurrió el 5 de noviembre de 2025 en la localidad de Whitestown, a las afueras de Indianápolis. María Ríos llegó junto con su esposo a una dirección que creían correcta para trabajar. Minutos después, fue alcanzada por una bala en el porche de la casa equivocada.
Autoridades investigan la muerte de la guatemalteca María Ríos
La Oficina del Forense del Condado de Boone confirmó que María Florinda Ríos murió por una herida de bala en la cabeza y clasificó el caso como homicidio. El fiscal del condado, Kent Eastwood, informó que continúa analizando las pruebas para determinar si se presentarán cargos contra la persona que efectuó el disparo.
Las autoridades indicaron que el caso se encuentra bajo revisión debido a la posible aplicación de la llamada “doctrina del castillo”, una ley estatal que autoriza el uso de fuerza letal en defensa propia dentro del hogar. Hasta el momento, no se ha revelado la identidad del propietario de la vivienda ni se han anunciado detenciones relacionadas con el hecho.
Comunidad guatemalteca en Estados Unidos pide justicia
La muerte de la guatemalteca María Ríos en Estados Unidos ha movilizado a la comunidad latina en Indiana. Migrantes y organizaciones sociales realizaron vigilias y manifestaciones pacíficas para exigir justicia y el esclarecimiento del caso.
El Consulado General de Guatemala en Chicago confirmó que brinda asistencia legal y consular a la familia de la víctima, además de acompañar el proceso de repatriación del cuerpo hacia Guatemala. Asimismo, se organizan colectas para cubrir los gastos funerarios y apoyar a los cuatro hijos de María Florinda Ríos.
La investigación continúa abierta, mientras familiares y compatriotas esperan una respuesta clara sobre las circunstancias que rodearon la muerte de la guatemalteca en territorio estadounidense.