En una muestra de amor por los animales, una sucursal de la reconocida empresa de autos Omoda adoptó a un perro callejero y le dio un empleo en la agencia.
Todo comenzó cuando una joven vendedora de la distribuidora, conmovida por la situación de un perro abandonado, decidió rescatarlo y brindarle alimento y cuidado. Desde entonces, el cariñoso canino se ha convertido en parte integral de la familia Omoda, ganándose el corazón de todos los empleados y clientes con su lealtad y alegría.
Bautizado como Omodin, este adorable perro no solo ha encontrado un hogar en la agencia, sino que también se ha ganado un lugar en el corazón de todos los que lo conocen. Su presencia en la sucursal no solo ha generado una atmósfera de alegría y felicidad, sino que también ha llamado la atención de los clientes, quienes encuentran en él un compañero amigable y servicial.
La historia de Omodin es un recordatorio conmovedor del poder del amor y la compasión hacia los animales, así como de la importancia de crear entornos laborales inclusivos y amorosos para todas las criaturas, grandes y pequeñas. La empresa Omoda, reconociendo el valor de esta conexión única, ha obtenido el permiso de la marca para que Omodin pueda permanecer en la agencia, convirtiéndose en un símbolo de la dedicación de la empresa hacia sus empleados, de dos y cuatro patas.