Campesinos guatemaltecos realizaron bloqueos este lunes 28 de abril, al menos en 11 carreteras en nueve departamentos del país. Esto, en rechazo a la detención de los líderes indígenas Luis Pacheco y Héctor Batz Chaclán, ambos ex-miembros de la organización 48 Cantones de Totonicapán.
Líderes indígenas son acusados de terrorismo y enviados a prisión preventiva
Los líderes fueron acusados por la Fiscalía de terrorismo y obstaculización de la justicia. La jueza Carol Patricia Flores, señalada anteriormente por actos de corrupción, ordenó su prisión preventiva y dispuso que el caso quede bajo reserva judicial.
Ambos formaron parte de la dirigencia de las protestas de 2023 que defendieron el resultado electoral que llevó al actual presidente Bernardo Arévalo al poder. Organizaciones internacionales han rechazado las detenciones, mientras que el presidente Arévalo las calificó de espurias y sin fundamento legal.
Protestas y bloqueos se intensifican mientras crecen las críticas internacionales
Los bloqueos incluyen piedras, ramas y manifestantes instalados en las principales rutas del país. Además del repudio por las detenciones, los campesinos también exigen el cese del aumento salarial aprobado por el Congreso en noviembre pasado.
El gobierno de Arévalo mantiene una postura abierta al diálogo, mientras que la Fiscalía contra el Crimen Organizado acusa a los manifestantes de planear los bloqueos y afectar el patrimonio ciudadano. La presidenta mexicana Claudia Sheinbaum expresó su apoyo a los detenidos y al presidente guatemalteco.
La detención de los líderes indígenas Luis Pacheco y Héctor Batz Chaclán ha generado una fuerte respuesta social y política en Guatemala, evidenciada por los bloqueos carreteros en todo el país y la condena internacional. Mientras el Ministerio Público insiste en sus acusaciones, diversas organizaciones y gobiernos señalan una posible criminalización de la protesta social y el uso político de la justicia. En medio de la tensión, el gobierno de Bernardo Arévalo busca mantener el diálogo.
