El gobernador Greg Abbott firma una ley que otorga amplios poderes a las autoridades texanas para detener y deportar a migrantes que cruzan ilegalmente la frontera con México.
El gobernador del estado de Texas, Greg Abbott, promulgó el pasado lunes la ley SB4, considerada una de las legislaciones estatales de inmigración más rigurosas en la historia reciente de Estados Unidos. La medida otorga a las autoridades estatales facultades excepcionales para detener y buscar la deportación de migrantes sospechosos de haber cruzado ilegalmente la frontera con México.
La SB4 concede a las fuerzas de seguridad texanas la autoridad de detener, arrestar y encarcelar a migrantes bajo nuevos cargos de entrada ilegal a nivel estatal, según informó The Wall Street Journal. Además, permite a jueces estatales emitir órdenes de deportación de facto contra aquellos que se sospeche han infringido la ley, aunque aún existen incertidumbres sobre la implementación de esta disposición.
La nueva legislación representa un intento sin precedentes por parte de Texas de asumir competencias en materia de inmigración y control fronterizo, ámbitos tradicionalmente manejados a nivel federal. Este movimiento anticipa un posible choque legal y político de gran magnitud con grupos de derechos civiles y con la administración del presidente Joe Biden.
La SB4 transformaría la estructura actual, donde la mayoría de las violaciones de migrantes son tratadas como casos civiles. La ley permitiría a las autoridades estatales sancionar con hasta 180 días de cárcel y multas de hasta 2.000 dólares por ingreso ilegal, y hasta 20 años por reingreso ilegal, dependiendo de antecedentes de deportación o condenas previas, según detalló CBS News.
Reacciones del Gobierno Mexicano
Recientemente, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que el Gobierno de México, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores, ha comenzado un proceso para cuestionar legalmente una legislación promulgada por el gobernador de Texas. Esta ley faculta a la policía para detener a migrantes y otorga a los jueces locales la autoridad para ordenar su expulsión del país.
“Ya se ha iniciado un proceso en la Secretaría de Relaciones Exteriores para impugnar esta ley, y además, expresamos nuestra firme oposición a estas medidas. Queremos asegurar a nuestros compatriotas y a los migrantes que estaremos defendiéndolos”, afirmó el presidente AMLO en sus declaraciones de esta mañana.