Su larga trayectoria en la administración pública y en cargos de elección ciudadana convierten a Ana Llilia Herrera en la gran preferencia de los mexiquenses
Cada vez son más los sectores de la opinión pública que sostienen que Ana Lilia Herrera es la mejor opción para gobernar al Estado de México. Su larga trayectoria en la administración pública y en cargos de elección ciudadana la convierten en la gran preferencia de los mexiquenses que no están de acuerdo con que Morena se apoderé de la entidad más dinámica y productiva del país en las votaciones del año entrante.
Ana Lilia representa justo lo contrario que el capricho de López Obrador, Delfina Gómez, quien fue sancionada por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación por haber arrebatado parte del salario de los trabajadores del municipio de Texcoco y del Sistema Integral para el Desarrollo de la Familia con fines electorales. La multa impuesta a Morena fue por más de cuatro millones de pesos.
Las sospechas de que Delfina Gómez, el Presidente y Morena repitan esas prácticas ilegales no son pocas; después de todo, ahora con el aparato de gobierno, el dinero que se usará en la compra de votos será mucho más que el de hace seis años. La trampa, la corrupción y la hipocresía son las características del gobierno federal y Gómez es uno de sus grandes ejemplos.
A pesar de la sanción y de la aceptación del delito, Gómez fue designada por López Obrador como secretaria de Educación Pública sin tener preparación para ocupar ese cargo, en el que está depositado el futuro de millones de niñas y niños. Desde su llegada a la SEP, todo México sabía que esperaba el dedazo desde Palacio Nacional para competir por el EdoMex; pero antes elaboró un aparato de adoctrinamiento en los planes educativos con los libros de texto con los que Morena atenta contra la libertad y el conocimiento.
En contraste, Ana Lilia demostró ser transparente en el uso de los recursos públicos cuando ocupó la Secretaría de Educación del Estado de México, en la que promovió campañas eficaces en favor del aprendizaje de las zonas más necesitadas de la entidad. Libre y preparada en las mejores universidades de México, Ana Lilia es el símbolo de la preparación y el profesionalismo que necesita el estado para continuar con su desarrollo económico, social, cultural y deportivo. Con Ana Lilia el Estado de México seguirá creciendo.
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